¿Cuántas
veces habéis recibido en el móvil una imagen picaresca del hijo de Shakira y Piqué? ¿Cuántas lo habéis
visto/compartido en las diferentes redes sociales? En veinticuatro horas de
vida que tiene el recién nacido me ha pasado muchas más veces de las deseadas,
que son ninguna. Pero me ha dado que pensar sobre la reacción de la gente ante
un nombre más común, es como si no estuviesen acostumbrados a la onomástica que
no se ajuste al santoral católico o no sean nombres pseudo-modernos.
Este
hecho no es más que uno de los múltiples reflejos de nuestra sociedad de
pandereta: la que engulle horas de telebasura, vive con un ojo en las
situaciones ajenas por no tener los dos en las propias y se comporta como una
oveja más a la que esquilan sin darse cuenta.
Ante
esta situación es normal que unos cuantos listillos hagan lo que se les antoje
y se vayan de rositas porque a los dos o tres días habrá algo más improductivo y
novedoso de lo que preocuparse.
Pan y circo, y la gente desviará la atención de los temas realmente importantes. En el día de hoy fútbol y sálvame, y encima la gente se engancha a estas cosas como si lo primordial no fuesen otras cosas. No obstante, has reflejado a la perfección lo que más de uno pensamos. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminar